5 ideas de regalos para las bodas de oro

Por último, ninguna celebración de las bodas de oro estaría completa sin los regalos adecuados para la (todavía) feliz pareja. Pero, ¿qué regalar a dos personas que parecen tenerlo todo? He aquí cinco ideas que pueden funcionar:

1. Fotos perfectas

Encuentra una vieja foto favorita de la pareja dorada y dale un tratamiento especial. Puedes hacer un cuadro con ella, ampliarla en un lienzo o simplemente comprar un marco de fotos para que quede perfecta.

O bien, ¿por qué no contratar a un fotógrafo profesional para que haga un retrato familiar que pueda presentarse en un marco dorado o incluso en un lienzo? Imagínese los años de placer que esto le proporcionará.

2. La nostalgia del periódico

¿Qué te parece buscar un periódico original de la fecha de la boda de hace 50 años? Es un bonito recuerdo de lo que ocurrió en el gran día y te traerá muchos recuerdos felices.

3. Historia familiar

¿Por qué no arrojar algo de luz sobre el árbol genealógico que se remonta a varias generaciones, o sobre la historia del apellido de la pareja? La genealogía es muy popular, y no sólo entre las generaciones mayores. Hay muchas empresas especializadas en servicios de búsqueda de familiares y puedes imprimir un libro, un gráfico o un póster con los resultados, incluyendo tu propio escudo familiar, que sería un regalo de bodas de oro muy especial.

4. Alegría en el jardín

Las flores son siempre un regalo bonito y atento, pero si lo que busca es un regalo de origen vegetal que siga dando frutos, ¿qué tal algo para el jardín? Si la feliz pareja es aficionada a la jardinería, las rosas son siempre las favoritas. La Rosa Golden Wedding es la elección perfecta: es una planta vigorosa y compacta con racimos de flores grandes y bien formadas de color amarillo dorado y una ligera fragancia.

5. Crear recuerdos

Los regalos materiales no siempre son la solución adecuada, pero ¿y si pudieras regalar a la pareja una experiencia memorable? Ya sea una buena cena seguida de entradas para un espectáculo y una noche en un lujoso hotel, un fin de semana en un balneario en el campo o el viaje de su vida a algún lugar al que siempre hayan querido ir (o volver), debe haber algo que haga cantar al corazón.

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